
La manifestación transcurrió por las calles de San Juan de Aznalfarache con el rigor combativo que la ocasión merecía. Se reivindicaba, además del acoso laboral en el Ayuntamiento, el derribo de viviendas planteado en el avance del nuevo PGOU. Las vecinas y vecinos perjudicados con la especulación urbanística unían su clamor al propio de la anarcosindical y las consignas, coreadas por todas/os, animaban la manifestación. Los tambores, trompetillas y megáfonos hacían su labor de llamamiento a San Juan de Aznalfarache a luchar por la justicia social y la democracia directa.
Señor Troncoso... sólo queremos ser escuchados y comprendidos, tanto en el tema del acoso laboral como en el derribo de viviendas. Es justo.
Salud.
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